
Aceptaron y en cuestión de segundos, deje el termo y mi mochila y empeze a trabajar con los gauchos y la negra se fue a hacer las empanadas con otras chicas.
A la noche, ya era participe de la organización y personal del evento que se denominaría "La fiesta del fogón y del vino hervido".
Servía con nuestro termo a toda mano que levantaba su vaso. Todo lindo, música, bailes, chistes pero lo que no me convenció para nada fue lo que decía en la espalda de las remeras del algunos organizadores : fiesta del fogón y vino hervido por la candidatura al diputado pirulo no se cuanto....
Esta claro que nuestro apoyo solo era con la gente de Corralito y no nos pusimos ninguna remera.
De garrón a Salta: dos días haciendo dedo fue lo que nos costo ir a Salta Capital, por suerte un camión de vialidad se apiado de nosotros y nos llevo, la Quebrada de Cafayate paso en segundos, casi como un sueño, el camión iba rápido y por mas ganas que tenia de bajar ahí no daba había que aprovechar el viaje.
Salta Capital: No es donde quería parar, pero obligadamente bajamos las mochilas por esa noche en una vieja pensión. Al día siguiente la negra salio temprano a vender sahumerios y yo me quede dormido hasta que la dueña me desalojo.
Recuerdo que estaba un poco triste por no haber podido bajar en la quebrada, tenia muchos recuerdos lindos de ese lugar y gente por conocer, recuerdo un atardecer muy raro en donde el cielo se veía medio nublado y los últimos rayos de sol se asomaban entre las nubes, viajamos un par de horas, y a Salta llegamos de noche con mucho frío.